La concejal justicialista lomense habló de todo y todos. Su relación con Martín Insaurralde, su presente político y el futuro. La situación en Cuartel Noveno.
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SR: ¿Cómo ves la marcha del gobierno de Alberto Fernández?
MARITA: Estoy muy preocupada. Estamos todos poniendo un poquito de cada uno para que esto vaya teniendo un rumbo. Estamos expectantes a la espera de ver los resultados. Lo que más le preocupa a la gente es el rumbo, hacia dónde vamos. El común de la gente lo que quiere es llegar a fin de mes y poder garantizar el plato de comida a su familia.
SR: ¿Crees, cómo algunos sostienen, que la llegada de Sergio Massa es la “bala de plata” del gobierno, y si eso le sale bien significaría su candidatura a presidente?
MARITA: Yo creo que sí. Desde ya que si Massa logra estabilizar este proceso económico y salimos de esta encrucijada no tengas dudas que no solo va a ser el candidato a Presidente sino que va ser quien conduzca los destinos del PJ. Es un gran desafío y me parece que la situación es muy difícil. Todos seguimos esperando que Massa designe a su nuevo viceministro.
SR: Advertís lo del viceministro. ¿Lo decís por algo especial?
MARITA: Estamos expectantes con eso, porque también te marca cuál es el proyecto económico. Se lo mencionó a Gabriel Rubinstein, algo pasó en el camino. Por eso digo que no se trata de nombres sino de acciones y cuál es el proyecto que nos van a presentar de país. Estamos en una crisis. La persona que pongas en ese lugar te marca un rumbo.
SR: ¿Cómo ves el rol de Cristina Fernández en todo esto?
MARITA: Cristina tuvo que hacerse cargo, por eso designaron a Massa, y creo que está viendo cómo se transita esta etapa. Cristina es una parte de este frente y como tal tiene que hacerse cargo del rol que le corresponde.
Lomas
SR: ¿Cómo ves todo esto de la revolución de las obras en Lomas de Zamora?
MARITA: Tenemos muchas revoluciones. Por ejemplo en Cuartel Noveno tenemos las de las cloacas, que son muy necesarias y las tenemos desde 2011. Miren si hemos visto pasar la revolución de las obras.
SR: ¿Lo decís de manera irónica?
MARITA: Lo digo en ambos sentidos. Me parece genial la revolución de las obras cuando generan las transformaciones que los vecinos pueden ver, pero también cuando se concretan. Todo lo que sea para mejorar la calidad de nuestros vecinos me parece genial. Hay que marcar los tiempos que a veces le complican la vida. Hay que tener mucha paciencia, y la tenemos. Por eso digo que nosotros en Cuartel Noveno venimos desde el 2011 esperando poder conectarnos a las cloacas.
SR: ¿Y en este contexto cómo lo ves a Cuartel Noveno?
MARITA: Soy una gran defensora de Cuartel Noveno. Yo recuerdo que durante el gobierno de Néstor Kirchner se hizo una gran revolución de obras en la zona, se construyó desde una óptica de proyecto de país. Primero se arregló el tema del agua y después se asfaltó. Pero si vos me preguntas si hay deuda, yo considero que sí. Por más que muchos me hablen de esta revolución de obras, que me parece genial, yo considero que a veces hace falta escuchar un poco más a los vecinos, a los comerciantes y a los militantes. Hay que saber escuchar lo que dicen y proponen los vecinos, que son los que viven en el lugar. Por eso digo que Néstor supo escuchar y por eso transformó la realidad de Cuartel Noveno.
SR: Hace poco hubo una reunión cerrada en el teatro municipal, en el que se les pidió a los funcionarios que dejaran sus celulares. ¿Hubo tirón de oreja de parte de Martín Insaurralde?
MARITA: Fue una charla interna política de reordenamiento. Me pareció bien, la conducción decidió tener una charla con la estructura política local y que sea privada. Ante los cambios que se dieron en el país hacía falta una charla política interna. Era necesario. Y la verdad que no es lo mismo dialogar con Martín que hacerlo con el resto. La necesitábamos para reencauzar el rumbo y analizar las posiciones políticas. Y sí, Martín aprovechó la oportunidad para convocar a que se milite como lo hicimos en otros tiempos.
SR: ¿Pero hubo un reto de parte de Martín Insaurralde?
MARITA: Yo no sé si alguien sintió eso. En todo caso no lo sentiría como un tirón de orejas, en mi caso me sentiría orgullosa porque quiere decir que si la conducción te genera un teatro para trasmitirte inquietudes a resolver, yo me siento realizada. Quiere decir que alguien escuchó y entendió. Creo que no tuvo ese fin y por eso no lo tomé como un tirón de oreja.
SR: ¿Qué opinión tenés de Martín Insaurralde?
MARITA: Martín tiene las condiciones para estar en el cargo que él considere que pueda desarrollar. Es un dirigente de Lomas de Zamora que transformó, junto a un equipo, el distrito. Ha tenido un gran crecimiento, dio un salto importante. Es un hombre que no tiene techo y al cual respeto.
SR: ¿Cómo es tu relación con Martín Insaurralde y con el resto del gabinete lomense?
MARITA: Con Martín perfecta, como siempre. Con el resto con mis idas y vueltas, depende con quién. Hoy estamos en un impasse.
SR: ¿Y con Marina Lesci?
MARITA: Es una gran compañera. Es la intendenta interina. Es una buena piba, y lo digo en el sentido que es muy joven. Es una buena chica.
SR: Hace poco dijiste: “Estoy acostumbrada a que me conduzcan y no que me den órdenes”. ¿Te referías a alguien en especial?
MARITA: Vamos a incorporar que me “disciplinen”. Lo dije por las formas. Venimos de una generación en la que había debates, encuentros y una construcción política hecha con los cuadros políticos y profesionales, pero también hecha desde el territorio. Yo soy el emergente de la crisis del 2001. Estoy acostumbrada a charlar con esos compañeros, a respetarlos, a que me conduzcan, a que me entiendan y me escuchen. Estoy acostumbrada a esa construcción política y no a que me ordenen. Porque si me quieren ordenar sería empleada.
SR: ¿Tenés buena relación con las autoridades municipales?
MARITA: Con algunas sí, no con todos. Pero por ahí ocurre porque no provienen de la política, vienen del sector administrativo o de otros sectores y a lo mejor no lo entienden, no lo saben, no lo reconocen. Reciben directivas y transmiten directivas.
El futuro
SR: ¿Estás cómoda dónde estás?
MARITA: Siempre estoy cómoda donde estoy, porque hago lo que quiero hacer. Tengo 50 años de vida y he transitado todo. Nosotros lo que siempre vamos a plantear es, desde la política, desde el territorio a la política y dentro de un contexto de país, que realmente se pueda volver a charlar y discutir sin temor a tener que dejar un celular porque te graben. Que podamos nuevamente mirarnos cara a cara y compartir un mate. En definitiva lograr los puntos de encuentro para lograr los objetivos.
SR: ¿Crees que algunos quieren que te vayas del FdT?
MARITA: Si fuese así que me lo digan. No tengo ningún inconveniente. No creo que sea así. Pero si se da, se da. Uno nunca sabe lo que pueda llegar a pasar. Yo nunca descarto nada. Soy parte de un Frente que fundé junto a Emilio Tovani en Lomas de Zamora. Hoy muchos están dentro de este frente, en el que muchos compañeros en su momento le pusieron el cuerpo. En aquel momento también quisieron disciplinarnos y creamos el primer Frente para la Victoria de la provincia de Buenos Aires. Fue en Lomas de Zamora. Y no fue en cualquier momento, Duhalde todavía tenía poder político.
SR: ¿Pero estás conforme con este presente?
MARITA: Cuando la persona no se puede expresar porque le estás condicionando el ingreso a su hogar, le estás condicionando la comida en un momento crítico del país. Eso no es peronismo.
SR: Te vimos recientemente en un acto encabezado por Guillermo Moreno en La Matanza. ¿Es un anticipo de lo que puede venir en tu futuro político?
MARITA: Guillermo Moreno me llamó y me contó de su proyecto. Me dijo vos sos peronista no te podés ir a otro lugar. Yo le respondí que no me estaba yendo de ningún lado y reitero: yo fundé este frente y no me voy, no lo planteé nunca. Me invitó a la presentación que hizo en La Matanza con parte del movimiento obrero. Me dijo vení, acá tenés un espacio. Me siento orgullosa de mi relación con él porque considero que es el último soldado peronista.
SR: ¿Estás hablando con otros espacios políticos?
MARITA: Yo estoy hablando con todos los compañeros y compañeras. Yo respeto la conducción de Martín Insaurralde en Lomas de Zamora. Cuando tengo que tomar una decisión, en el orden distrital, lo charlaré con él. En lo nacional, la verdad que sí: me llamaron de muchos sectores políticos y dialogo con todos. Y la verdad que a mí me encanta hablar, porque la política es eso: dialogar.
