Mientras la Junta Electoral local confirmó el triunfo de Alejandro Trotta, desde el sector que lidera Diego Grafeuille adelantaron que apelarán la resolución.
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entrevista radial
Las escaramuzas y esquirlas siguen replicándose luego de la polémica interna del radicalismo de Lomas de Zamora. A primera de hora de la mañana de ayer la Junta Electoral local rechazó todos los pedidos de impugnación presentados por las dos listas en disputa y ratificó el triunfo de Alejandro Trotta (Evolución). La reacción no se hizo esperar del otro lado, fue el propio Diego Grafeuille quien confirmó que apelará lo resuelto por dicha Junta y que aún no reconocía la victoria de la lista 115.
“Hubo violencia, barras bravas, amenazas e intimidaciones que sufrí yo personalmente y la candidata a vicepresidenta Alejandra Sanjurjo. Todo con un fin: evitar que quienes nos acompañan vinieran a votar y sacarles la boletas en la puerta. En definitiva, cambiar el resultado de una elección que veníamos ganando”, aseguró Grafeuille en contacto con el programa radial Sin Retorno (lunes a viernes de 10 a 13 por GPS El Camino FM 90 .7 y AM 1260).
El ex candidato a presidente por la lista 308 afirmó que “todavía no hay un ganador” de la elección del domingo pasado, para luego remarcar que “acá hablan de que quieren evolucionar pero recurren a las peores prácticas que el radicalismo siempre ha combatido. Si habilitamos que la violencia sea generadora de derechos, estamos mal”.
Al mismo tiempo apuntó contra la junta electoral local al narrar que “nosotros denunciamos a las 10.30 de la mañana todo lo ocurrido (en la escuela 95), y la Junta Electoral no hizo nada para verificar lo que nosotros estábamos denunciando. Debió constituirse en el colegio y verificar. Dejó que todo siguiera su curso”.
Acto seguido enfatizó: “Quieren que la violencia sea la que determine el resultado de las elecciones internas de la UCR y eso no puede ser. Por eso nosotros iniciaremos los procesos de apelación correspondiente”.
Comunicado
Grafeuille explicó que primero se realizará una apelación en la Junta Electoral de la UCR provincial, y que de no prosperar se seguirá el camino de la justicia electoral. En el medio hubo un comunicado de fuente tenor político de la lista 308, que bajo el título “A nosotros nos eligieron los radicales, no los barras bravas”, responsabiliza de los hechos de violencia a Martín Lousteau y Pablo Domenichini (principales referentes de Evolución).
“El repudio a la violencia tiene que ser público y manifiesto. Los violentos no pueden estar dentro del partido conduciendo. Por lo menos tendrían que tener el decoro y decir: nos equivocamos y queremos solucionarlo”, remarcó el dirigente radical, quien finalmente indicó que lo ocurrido “es una práctica habitual de Evolución. Cuando no puede dar la discusión se recurre a la violencia”.
