La concejal del FdT expresó su malestar por la falta de conducción local. Aseguró que “falta planificación” y “política”. Reclamó “ámbitos de discusión” y reconoció que no participa de las reuniones de bloque.
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La última sesión del Concejo Deliberante de Lomas de Zamora volvió a dejar mucha tela para cortar, sobre todo del lado del oficialismo. El acompañamiento de la concejala oficialista Marita Velázquez a un pedido de informe de la oposición sobre el estado del quirófano del hospital Evita generó más de una suspicacia. La edil, en diálogo exclusivo en el programa Sin Retorno (lunes a viernes de 10 a 13 por GPS El Camino FM 90.7), abrió el ventilador y no se guardó nada.
“Sé que muchos en mi bloque se han molestado con eso, pero yo vivo en mi barrio y les veo la cara a mis vecinos. Sé cuál es la realidad”, expresó Marita Velázquez al referirse a la polémica por el estado de la situación edilicia en el Hospital Evita de Lanús.
“Yo atendí a mis hijos en el Hospital Evita, sobre el cual tengo la mejor de las opiniones sobre los médicos. Pero la situación edilicia no es la que deseamos y los médicos hacen lo que pueden con lo que tienen, entonces negar esa realidad no me parecía correcto”, enfatizó.
Cuando se le recordó que era un hospital de Lanús, aclaró: “Es un interzonal que abarca a nuestra región y que depende de la región sexta”, para luego advertir que “habría que decir porque vamos ahí y no al Alende, si lo queremos llevar a otro terreno en el que alguno se ofenda”.
La edil oficialista subió la apuesta al sostener que en la actualidad existe un “comportamiento oficialista de obediencia. No podés decir nada que critique la gestión. No es así. Después se asombran porque aparecen los Milei”.
En ese marco aseguró que “nos están faltando los ámbitos de discusión de un proyecto político. Nos faltan los ámbitos donde nosotros generábamos aquellas críticas pero para que surjan propuestas de gobierno”.
Siguiendo esa línea aclaró que “más que de verticalismo, de lo que hablo es que no se diga hacia afuera o que no escuche aquel que conduce el distrito, que algo funciona mal. Si no se generan los ámbitos para discutir esto, lo tenemos que hacer público”. Marita Velázquez puso como ejemplo lo ocurrido en el día de ayer con la Escuela 67, que no tuvo clases porque no tenía gas. Algo que ella ya había informado pero que no se solucionó.
Cuando se le preguntó qué pasaba cuándo ella denunciaba este tipo de situaciones, sorprendió con la siguiente respuesta: “Algunos te escuchan, les molesta, supongo que lo tomarán y transmitirán. Yo en el bloque participaba en la medida que podía plantear todos los temas. Después, cuando ves que algunos se ofenden por lo que planteas decidí no participar más”.
Marita Velázquez no tuvo dudas en afirmar que el problema que está existiendo en Lomas de Zamora es de “una falta de planificación y de política total”.
Insaurralde
En otro tramo de la entrevista se la consultó sobre su relación con Martín Insaurralde. La concejal peronista aseguró que “con Martín tuve, tengo y creo que tendré la mejor de las relaciones. Tengo un gran respeto por él”.
Como contrapartida advirtió que “me parece que la palabra conducción a algunos les queda grande. El saber conducir un distrito, un proyecto, entender y escuchar a todos. Eso se lo respeto mucho a Martín Insaurralde. De ahí para abajo no sé quienes conducen en Lomas. Yo estoy acostumbrada a que me conduzcan, no a que me impongan”.
También se le pidió opinión sobre la actual intendenta interina, Marina Lesci, a la que calificó de “una buena chica, que tiene buenas intenciones y trata de representar a Martín Insaurralde de la mejor manera posible”.
Sobre su relación con Diego Cordera y el rol que ocupa como titular del HCD indicó que tiene “buen diálogo”, aunque remarcó que “debemos reconocer que nos hemos enfrentado durante 15 años. Porque hay que ser claros: Diego viene de Cambiemos, del PRO”.
Finalmente subrayó que el “el proyecto de Martín Insaurralde lo defendí desde que nació, no lo hice en los últimos años. Así que si vos me ponés que me conduzca el PRO en el Concejo Deliberante, bueno, a buen entendedor pocas palabras”.
